Como reza el refrán, a río revuelto ganancia de pescadores, GM lanzó un plan de incentivos para capitalizar sobre la crisis de Toyota, que permite a los propietarios de éstos y de vehículos de su división de lujo Lexus que los entreguen en intercambio, hacer un arrendamiento o lease de autos del fabricante de Detroit, libre del pago mensual por tres meses hasta por mil dólares. Mientras, a los que compren, les ofrecen finaciamiento al cero porciento por hasta 60 meses, y mil dólares de reembolso a quienes adquieran un auto al contado. El programa aplica vehículos de GMC, Buick, Cadillac y Chevrolet. El plan termina al finalizar febrero.
Por su lado Chrysler, plantea su propio esquema que terminará el 1º de marzo: Chrysler ofrecerá mil dólares en incentivos para los propietarios de Toyota Sienna, y las camionetas Tacoma y Tundra, que opten por cambiar a modelos de Chrysler, Dodge or Jeep. Y para los conductores de vehículos de Toyota cuyo lease o arrendamiento esté a punto de expirar, también ofrece un estímulo idéntico.
Hyundai también se sumó a la cosecha promovida por la crisis de la firma japonesa, ofreciendo mil dólares de incentivo a quienes entregaran un Toyota por compra de un Sonata, Elantra o Elantra Touring, oferta que expiraría el 1 de febrero.
Al propio tiempo, Ford ofrece la misma compensación a quienes intercambien no sólo Toyotas sino Hondas también por un nuevo Ford, Mercury o Lincoln. |