Reguladores de EEUU han comprado el Lexus ES350 modelo 2007 de Rhonda Smith, una mujer de Tennessee que el martes 23 de febrero testificó en las audiencias congresionales que enjuiciaron los casos de aceleración descontrolada de algunos autos de Toyota. En medio de las lágrimas, Smith evocó el epsiodio de aceleración repentina de su coche cuando se encaminaba a Knoxville. El vehículo ahora va a ser estudiado en el centro de investigaciones de la National Highway Traffic Safety Administration en Ohio.
Según la mujer, en octubre del 2006, su Lexus se disparó hasta alcanzar las 100 millas por hora sin que ella lograra detenerlo a pesar de que hizo todo lo humanamente posible por pararlo, como presionar fuertemente el freno con ambos pies y hasta enganchar la marcha atrás, todo lo cual resultó inutil. Finalmente el carro cesó su aceleración tan misteriosamente como la inició tras agotar 6 millas de aterradora experiencia. Hay quines han puesto en tela de juicio cómo, según explicó la propia Smith, ella pudo llamar a su esposo al cellular y contarle lo que le estaba pasando.
“Avergüénsese, Toyota… avergüénsese, NHTSA”, exclamo dolida Rhonda Smith al terminar su testimonio ante el congreso.
Smith también dijo que un concesionario local no halló ningún problema y que un examinador de la NHTSA sospechó que el génesis de la situación pudo ser la alfombra que atoró el acelerador. El reporte dijo que una alfombra de caucho de las conocidas como All Wheather o “Todo Clima” estaba sobre la de felpa original del coche, lo que pudo haber causado involuntariamente el capítulo de aceleración repentina. Smith cree que la falla es de origen electrónico, no físico ni mecánico, cosa que Toyota niega vehementemente.
Su esposo examinó el auto sobre el suceso y no encontró relación fatal entre la afombra y el acelerador.
La NHTSA no practicó ningún test a la electrónica del vehículo y luego éste fue vendido a otro propietario que lo manejó por 27 mil millas más sin reportar problema alguno.
El auto de Smith estaba incluido en los 55 mil vehículos de Toyota sujeto a reparación por el asunto de la alfombra dislocada.
En la audiencia en la Cámara, un congresista increpó a Jim Lentz, jefe de la operación de Toyota en Estados Unidos, por no investigar el carro de Smith tal cual hacen los expertos en accidentes aéreos con los restos de un avión que se cayó. |