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por PEPE FORTE, editor del Canal de Autos de iFriedegg.com
y conductor del programa radial AUTOMANÍA de WQBA 1140AM
de UNIVISION AMERICA, sábados desde las 12:00PM ET.
Miembro fundador de SAMA.

Ilustración fotográfica del autor.

Posted on June/2015
• Information aired on AUTOMANIA June/2015

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La multinacional británica de servicios financieros Barclays, acaba de hacer un anuncio inquietante para el mercado y la industria automotriz a partir de una proyección, y ésta es que en los próximos 25 años, según los resultados de un estudio, los coches autónomos podrían reducir las ventas de los carros "normales" hasta en un alarmente 40%.

El reporte, titulado Disruptive Mobility, y que lleva la firma del analista Brian Johnson, apunta que la proyectada popularidad de los vehículos autónomos resultará en una caída casi a la mitad de la compra individual de autos, cuando las familias se apoyen en coches que manejan solos, que irán llevando y recogiendo por turno en una sola ruta o varias a los miembros del núcleo. Ese vehículo puede ser de la familia o simplemente uno ajeno, de un servicio, convocado a través de señal.

La visión de Johnson, por el momento, traza la existencia de 4 tipos de vehículos:

• Los llamados autos tradicionales, que aún existen...

• Los coches autónomos para familia, que usarán los integrantes del núcleo...

• Los coches autónomos compartidos, que son aquellos que uno llama a través del celular y que él bautiza con el gracioso nombre de Uber without the dude, o sea "Uber sin el tipo"...

• Y los servicios de car-pooling para ir al empleo en la mañana y volver a casa en la tarde, también basado en coches que se desplazan sin chofer.

El analista dice que en este escenario, los carros andarán más millas, pero se necesitarán menos carros. Esto mejorará el tráfico.

Johnson cree que aproximadamente una mitad de los carros serán los tradicionales, que se salvarán gracias a aplicaciones en particular, como los dedicados a ciertos tipos de negocios o faenas, los destinados a las áreas rurales, y aquellos que seguirán siendo representantes de status social. Pero la otra mitad dedicada a la esencia básica del automóvil, que es transportarse, será absorbida por los coches autónomos.

El investigador británico asegura que el impacto en la industria automotriz será enorme, y que grandes fabricantes de volumen en masa de vehículos como GM y Ford reducirán su producción entre un 58 y 68%.

Con este panorama en el tablero, Johnson visualiza también insospechadas fusiones de marcas y hasta la sorprendente desaparición de algunas de ellas, del mismo modo que emergerán fabricantes de estreno como Google y Apple. El esquema es parecido a lo que pasó con la revolución de la fotografía digital, en que casas históricas, fabricantes de material fotosensible, no pudieron hacer el crossover a los soportes digitales.

El experto también cree que los sistemas de renta de autos cambiarán a este tipo de vehículos. 

Y el impacto en la economía de la explotación de los carros autónomos, especialmente en las flotas de vehículos de transporte pagado, como los taxis, será sorprendente en lo que a costo respecta. El factor más caro por milla y por hora en un taxi es el taxista. Por ejemplo, según sus cálculos en el escenario actual, al quitar al conductor del taxi, el costo promedio podría ser de sólo 44 centavos en un sedan para una carrera privada con un solo ocupante, y de 8 centavos en un auto célula compartido por dos pasajeros. En el caso de Uber, cuyos servicios son más baratos que los de los taxis, la tarifa actual es de entre $3.00 y $3.50 dólares por milla para un viajero y, si compartido, entre $1.00 a $1.50 por milla en el llamado UberPool, y ya vemos que en caso de un coche autónomo cae a los citados 44 centavos cuando máximo.  

Y este cálculo está basado en autos de combustión interna. Como también se pronostica que los vehículos autónomos serán mayormente eléctricos, los costos serán más bajos todavía.

Johnson reconoce que todo esto parece todavía ciencia ficción, pero que en realidad está a las puertas. Nissan anunció hace un tiempo ya que para el año 2020 tendrá en venta un coche autónomo de producción regular y, en general, todos los grandes fabricantes de coches asumen que para el 2025 el fenómeno será patente con coches producidos por ellos.

Johnson compara a los autos normales y a los autónomos en la misma relación caballo-automóvil cuando los carros empezaron su vida hace ya más de 100 años. Durante un tiempo el mundo se apoyó aún en mayor cuantía en los caballos para las necesidades de transporte y servicio que en los automóviles, cuando éstos ya rodaban. Todavía en los años 20, la década de verdadera arrancada del mercado automotriz norteamericano, había más caballos en uso que carros. Pero para la década de los 30  el número de autos en EEUU superó a los caballos per cápita. En un abrir y cerrar de ojos, el uso del caballo cayó en un 85%.

De modo que ese auto que esta misma mañana usted vio en el garaje de casa... se perece muchísimo a un caballo en 1935...

 
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